¿Qué son agentes biológicos?
Se consideran agentes biológicos a los microorganismos, los cultivos celulares y a los parásitos humanos, susceptibles de originar cualquier tipo de infección, alergia o toxicidad.
Los microorganismos constituyen un grupo amplio y diverso de organismos que existen como células aisladas o agrupadas.
Entre los tipos de microorganismos tenemos:
- Virus: Son sistemas biológicos que presentan incluso tamaños ultramicroscópicos, los cuales pueden causar infecciones y sólo se reproducen en células huéspedes.
- Bacterias: Son microorganismos procariotas de forma esférica (cocos), de bastón recto (bacilos) o curvado (vibrios), o espirales (espirilos). Si bien algunas bacterias son patógenas (causantes de diversas enfermedades), una gran parte de ellas son inocuas o incluso buenas para la salud.
- Parásitos: Microorganismo que se aprovecha de los nutrientes de otro ser vivo.
- Hongos: Organismos eucariotas, que pueden infectar a las personas perturbando su equilibrio y enfermándolos.
Riesgos Biológicos
Probabilidad de la ocurrencia y magnitud de las consecuencias de un evento adverso relacionado con el uso de agentes biológicos que pueda afectar al hombre, la comunidad y el medio ambiente.
Figura 1. Señal de Riesgo Biológico
Tareas en las que se puede producir el Riesgo Biológico
Existe riesgo biológico en los laboratorios donde se trabaja con microorganismos o cultivos celulares.
También existe este riesgo cuando se efectúan actividades médicas y paramédicas con seres humanos.
A continuación se mencionarán algunos sectores afectados de forma muy especial por los riesgos biológicos en hospitales y clínicas y las diferentes vías por las que puede llevarse a cabo la transmisión de los Agentes Biológicos:
- Transmisión de persona a persona: Personal sanitario, personal de seguridad, médicos, enfermeras servicios públicos, etc.
- Transmisión a través de objetos o material contaminado: Material quirúrgico, suministros de limpieza, saneamiento público, vajillas, utensilios, etc.
Clasificación de los Agentes Biológicos
Grupo de Riesgo I: Tienen un escaso riesgo individual y comunitario, siendo muy poco probable que causen enfermedades en personas saludables.
Grupo de Riesgo II: Presentan un riesgo individual moderado y comunitario limitado; pueden causar enfermedades pero normalmente no constituyen un riesgo serio para el trabajador saludable, la comunidad y el medio ambiente.
Ejemplos: bacterias como: Clostridium botulinum y Escherichia coli; virus como: dengue, fiebre amarilla (cepa 17 D), hepatitis B, influenza y rubéola; parásitos como Necator americanus y Giardia lamblia.
Grupo de Riesgo III: Representan un riesgo individual elevado y comunitario bajo, suelen provocar enfermedades graves no propagándose de ordinario de una persona infectada a otra pero usualmente existen medidas profilácticas y tratamiento específico eficaz.
Ejemplo: virus de fiebre amarilla (excepto cepa 17 D).
Grupo de Riesgo IV: Presentan un elevado riesgo individual y comunitario, suelen provocar enfermedades graves en las personas, pudiendo propagarse fácilmente de un individuo a otro directa o indirectamente; usualmente no existen medidas profilácticas ni tratamiento específico eficaz.
Ejemplos: virus como: fiebre hemorrágica argentina (virus Junin), virus del Ébola y de la viruela humana.
Prácticas microbiológicas adecuadas
Los errores humanos y técnicos, así como prácticas microbiológicas de trabajo incorrectas, contrarrestan la eficacia de las medidas y de los equipos que se utilizan para proteger al personal de las instalaciones con Agentes Biológicos.
Pueden existir en el área la tecnología y los sistemas de seguridad más avanzados, pero si el personal no está educado y entrenado en los procedimientos y prácticas microbiológicas adecuadas, y no tiene incorporado los mismos como disciplina y cultura en su trabajo, no se logrará el resultado esperado con relación a las seguridades biológica e integral.
El director es el máximo responsable de la Gestión de la Calidad y de la Gestión de la Seguridad de su instalación y por tanto, debe exigir documentar los procedimientos de Calidad y de Seguridad Biológica en los Procedimientos Normativos de Operación (PNO) y en el Manual de Calidad.
En la mayoría de las instalaciones reconocidas internacionalmente, las Prácticas Microbiológicas Adecuadas (PMA) se elevan a la categoría de reglamento, pero en todas las instalaciones que manipulan Agentes Biológicos debiera designarse un especialista responsabilizado con la inspección de la Seguridad Biológica, el cual debiera contribuir a la preparación de dicho Reglamento y a la elaboración de materiales docentes para la capacitación del personal de su centro en las Prácticas Microbiológicas Adecuadas.
Se hablará de esto en los siguientes capítulos del curso.
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